Dispuestos a vigorizar el saneamiento financiero de la institución, consolidar al plantel futbolístico en su categoría y otorgarle un mayor impulso al desarrollo de las series menores y la sección femenina, se han mostrado los integrantes del recientemente elegido nuevo directorio de Deportes Puerto Montt, liderado por el timonel Germán Mayorga.
La convicción predominante es establecer una huella señera -al cabo del corto período de la gestión- que refleje una mayor potencialidad del club porteño en toda su dinámica. Particularmente, en lo que concierne a su identificación con la comunidad puertomontina y sus sentimientos deportivos. Con mayor preocupación por su cantera joven, para que se transforme en un fértil semillero capaz de aportar con valores de calidad al equipo superior. Con una mejor vinculación con el sector empresarial, cuya colaboración es determinante para el crecimiento institucional y su aporte al prestigio y proyección de nuestra ciudad puerto. Con un mejor reforzamiento del plantel, que asegure garantías de ascenso a primera, dejando de ser un discreto y simple acompañante en la división secundaria, donde sólo se lucha por no descender.
Falta más ambición desarrollista y ganadora en Deportes Puerto Montt. Una determinación y fervor de trepar cada vez más alto y de llegar más lejos, que motive, contagie y acerque a la gente cada vez más al club. Y lo haga interesarse por participar en ese desafío, ya sea como socio o hincha capaz de remecer el estadio con su masiva presencia.
Ya no sirven la tibieza, el andar a media máquina, las vacilaciones, la inseguridad, el conformarse con lo que hay... No, así no se actúa en el club deportivo de la capital de la Región de Los Lagos. Se debe estar a la altura de ese rango y privilegio, con más trabajo, dedicación, creatividad y determinación de conquistar grandes metas y sitiales.
En lo que resta del año, habrá que confirmar la permanencia en la B y en el 2019 la misión -única y total- será el regreso a la Primera División.