Lo ideal es que el desarrollo regional no sólo se concentre en las ciudades del territorio, sino que también se hagan esfuerzos por llegar a las zonas rurales, sobre todo, mediante la renovación de las tecnologías agrícolas y de los contactos, la creación de nuevas oportunidades laborales y un especial impulso a los emprendimientos. Un proceso innovador, donde, sobre todo, la juventud tenga el principal lugar de protagonismo y, de ese modo, opte por permanecer en el campo y no busque derroteros de vida en los horizontes urbanos, muchas veces sobresaturados y ultra competitivos.
Preocupa esta realidad, que muestra un evidente envejecimiento rural, estimulado por una emigración joven campo-ciudad cada vez más acentuada. Con evidente perjuicio del progreso integral regional, que así no funciona, cojea, desbalancea e imperfecciona la correcta marcha progresista, tornándola ineficaz.
En tal contexto, para que las nuevas generaciones vayan prefiriendo su futuro en el campo, es que instituciones como el Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap) y la ONG Canales coordinan iniciativas y esfuerzos,-mancomunadamente-, con el objetivo de estimular a los jóvenes a permanecer en sus terruños en la zonas rurales. Para lo cual, desde hace cinco años, han puesto en marcha un programa de emprendimiento dedicado a la juventud del agro y otro para los estudiantes de la carrera de técnico agrícola en liceos de la región. Proceso en vías de fortalecimiento, en la certeza de que el mundo agrícola rural y la fertilidad de sus tierras, requieren hoy más que nunca de un golpe renovador joven en el rubro, apoyado por los nuevos conocimientos, tecnologías y adecuadas relaciones empresariales y proyecciones en este ámbito.
Como sostiene, optimista, Eduardo Carmona, director ejecutivo de la ONG Canales, hay un futuro en el campo -para la juventud- porque el emprendimiento es una oportunidad real de inclusión social, de desarrollo económico y de beneficios familiares.
Así, también, la zona rural podrá alcanzar un mayor progreso y calidad de vida.