Convendría rescatar y actualizar la trascendencia que -para el desarrollo turístico local- tiene el proyecto de un parque urbano relacionado con nuestra bahía, en torno a la gran Cruz del santuario en la cumbre de Tenglo. Conjugando ese importante símbolo religioso con la necesidad de aportar a residentes y visitantes un enclave de esparcimiento natural panorámico y marítimo, que recree a la gente y, a la vez, consolide a Puerto Montt entre las ciudades-puerto más atractivas y dignas de conocerse de nuestro país.
Bajo esa inspiración, el año pasado, la Cámara Chilena de la Construcción, Iglesia, Municipalidad, Armada de Chile y la Universidad San Sebastián -que han impulsado la señalada propuesta-, llamaron a concurso de proyectos para el paseo o parque urbano vinculado a la Cruz en Tenglo, donde participaron once propuestas presentadas por alumnos de la carrera de Arquitectura de la Universidad de San Sebastián. Y cuyos resultados se conocieron en septiembre de 2017, siendo los ganadores los estudiantes Felipe Soto, Ángello Igor y Giovani Valeria. Sus talentosas creaciones respondieron de manera notable a lo anhelado por los organizadores se desarrolle como aporte a la calidad urbana y proyección turística de este puerto capital regional.
A cerca de un año de ese episodio, no ha habido avances en esos planes tan bien intencionados. Y ante la posibilidad de alejamiento de algunos de los líderes de la campaña, es oportuno reanimar y reforzar la cruzada, aunando voluntades y acción de parte del comité impulsor, el sector gubernamental y privado e instituciones en general. Además que estando elaborado el proyecto, se facilitan las opciones de obtención de recursos -ante el municipio, el gobierno regional u otros-, para ir materializando esta necesaria obra piloto -en materia de áreas verdes que tanto necesitamos- y que, al mismo tiempo, sería el comienzo de la soñada puesta en valor de la isla Tenglo, como eje indispensable y primordial del definitivo empoderamiento turístico de Puerto Montt en los nuevos tiempos de la "aldea global".