Cambio climático abre oportunidades para el desarrollo del sector hortalicero de la región
AGRICULTURA. Cultivos bajo plástico están demostrando un alto nivel de crecimiento. Aunque, para fortalecer al rubro, se busca formalizar esa importante actividad productiva.
El desarrollo de hortalizas en invernaderos comienza a extenderse en la Provincia de Llanquihue. Según la Seremi de Agricultura, la superficie de explotación está comenzando a ser destinada a la producción bajo plástico, bajo cuya cubierta ya son 20 las variedades que se siembran regularmente en el territorio.
"El cultivo en invernadero nos permite tener lechugas y cilantro para ofrecer durante esta época. Mientras que en verano, sacamos tomates, pepinos y hasta flores. Esa es la ventaja, la gente reconoce el sabor y la calidad de lo local", sostuvo María Fernández, productora del sector Colonia La Radio de Frutillar.
Juan Vicente Barrientos, seremi de Agricultura, explicó que los cambios en las condiciones climáticas "no presentan sólo amenazas, sino también oportunidades, siendo la producción de hortalizas una de las más beneficiadas".
Una experiencia exitosa en esta materia desarrolló la Cooperativa Tierra Sur, que asoció a 14 pequeños agricultores e inauguró este año una tienda campesina en Frutillar. El objetivo es proveer a la comunidad de hortalizas de la zona, en un lugar establecido y con una amplia oferta de productos hortícolas y procesados.
En el sector Pedernal de Frutillar establecieron su huerto, invernaderos y una sala de proceso, lo que les permite llegar con productos frescos y en poco a tiempo a sus clientes. "Estamos convencidos que promoviendo los circuitos cortos y tiendas de este tipo, podemos rentabilizar el negocio hortícola", apuntó Pablo Altamirano, representante local de la Unión Nacional de la Agricultura Familiar Campesina Cooperativa (UNAF).
En esta tarea no están solos, ya que la autoridad regional del agro tiene entre sus ejes prioritarios de gestión, potenciar rubros como el hortalicero. "Su base está en la pequeña agricultura familiar. Es un sector al que queremos apoyar, para mejorar la calidad de vida de los pequeños campesinos y, a su vez, facilitar (a la ciudadanía) el acceso a productos locales y sustentables", comentó el seremi Barrientos.
Informalidad
El estudio diagnóstico caracterizó a 39 productores de la Asociación Gremial Hortalizas Los Lagos A.G., que integran agricultores de las provincias de Osorno y Llanquihue. Demostró además que en términos de ingresos por ventas anuales, gran parte de ellos son microempresas.
La encuesta dio cuenta, en ese sentido. Una inquietante realidad: un 56% de los consultados no tiene inicio de actividades, lo que deriva en ventas informales y con alta restricción de desarrollo comercial.
Tal situación motiva el impulso de acciones, en los propios agricultores, para formalizar esos emprendimientos.
El seremi Barrientos expuso que a través de la Mesa Hortícola Regional "estamos desarrollando un trabajo conjunto con el sector, para promover la formalización de los hortaliceros, mejorar los canales de comercialización y generar transferencia tecnológica hacia los productores".
Carlos Vallejos, presidente de Hortalizas Los Lagos, explicó que "queremos posicionar la actividad hortícola local, darla a conocer y que la gente de la región la reconozca. Para eso es fundamental desarrollar y aplicar nuevas tecnologías al rubro; también profundizar convenios, como el suscrito con la Junaeb, que nos permite incorporar nuestros productos a las minutas de alimentación escolar. Si podemos replicar esta iniciativa con otras instituciones públicas, sería muy importante", subrayó.
Otro de los datos que mostró ese diagnóstico, está asociado a los registros de producción y contables. En ese ámbito, señala que un 68% de los encuestados no registra información de producción y que un 82% no maneja datos contables, por lo que se deberá trabajar en una gestión productiva comercial.