La implementación de estrategias para la promoción de la salud integral y el mejoramiento de la calidad de vida, fue el proyecto regional que la Corporación Luz Une (que va en ayuda de familias con niños con cáncer), desarrolló con recursos del Fondo de Fortalecimiento de Organizaciones de Interés Público del Ministerio Secretaría General de Gobierno.

Paola Prado, directora de la institución beneficiaria, explicó que "fueron tres talleres donde se tocaron diferentes temas, pero siempre viendo el concepto de salud holístico, bio-psicosocial. Se habló de nutrición, meditación, risoterapia, de la alegría de vivir. El tema psicológico fue muy relevante, de cómo atravesar crisis de una enfermedad como el cáncer".

La iniciativa, que se desarrolló entre los meses de febrero y abril, recibió cerca de cuatro millones de pesos para su ejecución. A través de talleres, Luz Une capacitó a sus voluntarios para la atención de las familias oncológicas.

La seremi de Gobierno, Ingrid Schettino, valoró el trabajo de la institución, precisando que "aquí se entrega amor, alegría, se comparten experiencias, se trabaja con salud integral y se estrechan lazos con las familias que tienen que enfrentar el cáncer".

Mas de 200 personas marcharon ayer por las calles de Puerto Montt para sensibilizar a la comunidad acerca del autismo, en una actividad que se realiza durante abril desde 2004, año en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 2 de abril como el Día Internacional del Autismo.

El recorrido se inició al mediodía en el Campo de Marte, llegando la columna con globos azules hasta la Plaza de Armas de la Capital Regional cerca de las 13 horas.

Víctor Valderas, vicepresidente de la Asociación de Padres y Amigos de los Autistas (Aspaut) de Puerto Montt, precisó a El Llanquihue que "esta es nuestra manera de conmemorar el Día del Autismo, de compartir con la comunidad y agradecer el apoyo que han dado a nuestra organización que nace en 1993. Somos familias con hijos autistas, pero al igual que todos, tenemos las mismas necesidades, anhelos y esperanzas que las otras familias".

Este año la marcha se desarrolló bajo la consigna "Ponte en mis zapatos", llamando a la población a desarrollar una actitud empática con los autistas. Para exteriorizarlo, varios de los asistentes caminaron usando un calzado diferente en cada uno de los pies.

"La idea es ejemplificar lo difícil que resulta para un autista, ya sea niño, joven o adulto, participar de la comunidad. Ello porque la sociedad en la que hoy vivimos hay múltiples estímulos que a ellos les complican, como los ruidos y las luces. Con esta actividad queremos explicarle a la gente que la conducta de un autista tiene una causa que a veces ni siquiera los padres comprendemos", dijo a El Llanquihue Claudia Oyarzún, presidenta de la Fundación Educacional Aspaut.

A partir este año, la fundación es la sostenedora de la Escuela Camino de Esperanza de Puerto Montt, que entrega educación a 63 niños y jóvenes autistas, que van desde los 2 años y medio a los 23 años.