Erwin Schnaidt Ávila
En un 14% disminuyó la ocupación hotelera de Puerto Montt durante enero, en comparación con igual mes de 2017.
Al 31 de enero pasado, esa demanda promedió un 68,5 %, inferior al 82,5 %, que fue la media registrada en la misma fecha del año anterior.
De acuerdo a un sondeo practicado por el Área de Estudios, y el Comité de Turismo de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Puerto Montt, ese porcentaje prácticamente no ha variado durante el mes. En la primera quincena de 2018, los encuestados reportaron un 65,4% promedio de ocupación.
La muestra recoge datos de nueve hoteles asociados al gremio, tanto de cadenas nacionales e internacionales, así como emprendimientos locales, los que en conjunto suman un total de 414 habitaciones.
Este resultado no dejó indiferente a Jorge Tramón, presidente del Comité de Turismo de esa Cámara, para quien se hace necesario generar pactos en materia de promoción del destino. "Nos obliga a reflexionar, a buscar alianzas y a tomar medidas para que el próximo año nos encontremos en un mejor pie", sostuvo.
Azaroso y estático
Para el dirigente es necesario ser proactivos en esta materia. "No podemos dejar que el turismo sea azaroso, que vengan turistas y que no tengamos idea de qué cantidad va a venir", planteó.
De acuerdo a Tramón, al hablar de turismo "permanecemos estáticos, esperando que el turista llegue. Eso atenta contra la industria".
Entre las justificaciones de esta caída en la llegada de visitantes, el vocero resaltó el tipo de cambio. "Como el precio del dólar ha estado bajo, hace que el chileno vaya a vacacionar al extranjero y que el extranjero venga en menos cantidad, porque nos convertimos en un país más caro", expuso.
Sin embargo, insistió en que la principal causa de este menor interés de los viajeros por Puerto Montt, debe buscarse al interior del sector, al apuntar a "nuestra pasividad para enfrentar el mercado turístico", enfatizó.
Propuso reforzar la promoción de los atractivos turísticos. "Puerto Montt es una ciudad preciosa, pero siempre estamos denostándola. Tenemos que publicitar nuestros productos; aliarnos con mayoristas de Santiago y el extranjero, cosa de existir en ambos como destino. Tenemos que usar el borde costero como un recurso económico y no sólo como una actividad contemplativa", expuso, para lo que se requiere el "concurso unido del sector público y privado".