El piloto francés Jean-Eric Vergne, del equipo chino Techeetah, se quedó ayer con el triunfo en la cuarta fecha de la Fórmula E, carrera de vehículos eléctricos que se disputó por primera vez en Chile en un circuito urbano de 2,46 kilómetros de longitud por el centro de Santiago.
Vergne fue el victorioso de la jornada, tras dominar el circuito de 37 vueltas recorrían el Parque Forestal, el río Mapocho y la Plaza Italia, entre otros lugares icónicos de la capital.
El francés mantuvo la cabeza de la carrera en un duelo en el que se lució junto a su compañero de equipo, el alemán Andre Lotterer, en los giros y el impecable control de los vehículos.
La dupla además consiguió el primer 1-2 de un equipo en la temporada, con Lotterer en la segunda ubicación.
"Estoy muy contento, no sabía que gané hasta que vi la bandera", dijo Vergne a los periodistas que asistieron a la pista, antes de entonar el himno de su país y el de China, por el vencedor Techeetah, desde el podio.
Este éxito le permitió al francés quedarse con el liderato del campeonato, que antes ostentaba el sueco Felix Rosenqvist (Mahindra Racing) con dos triunfos en las tres carreras disputadas hasta el momento: Hong Kong y Marraquech.
En tercer lugar llegó el piloto suizo Sebastien Buemi, de la escudería Renault, quien alcanzó su primer podio en la pista chilena.
Entre los pilotos que participaron ayer en esta especialidad destacaron algunos nombres por su paso por la Fórmula 1, como es el caso del brasileño Nelson Piquet, el suizo Buemi y el alemán Nick Heidfeld.
La carrera había generado poca expectación en el público local, que estuvo más pendiente de los cortes de tránsito que se llevaron a cabo para preparar el circuito.
Sin embargo, los chilenos asistieron ayer en masa para ver por primera vez el 'Santiago ePrix 2018' de Fórmula E, que tuvo a la cantante australiana Kylie Minogue de invitada.
Según la organización, esta cuarta fecha fue vista por alrededor de 200 millones de personas en todo el mundo.