El trabajo social y de justicia tras los delitos de violencia intrafamiliar
TRES CASOS. Entre el 15 y 16 de julio, Puerto Montt se remeció por varios hechos de gravedad.
En dos días, entre el 15 y 16 de julio, la comunidad de Puerto Montt se remeció con tres hechos de violencia intrafamiliar (VIF) que terminaron en trágicas y graves consecuencias.
El parricidio en la población Antonio Varas Norte, la violenta agresión de un suegro a su yerno en Padre Hurtado (Mirasol) y la agresión de un cabo primero de carabineros a su pareja -también funcionaria de la institución, en Valle Volcanes-, fueron los hechos que marcaron la pauta noticiosa.
Aunque la estadística del Tribunal de Garantía indica que a la fecha (16 de julio) las audiencias por VIF alcanzan al 7,85 por ciento, con 444 casos de un total de 5 mil 656, los hechos son notorios por la gravedad y violencia.
Sólo en enero, las audiencias alcanzaron al 9,38 por ciento, registrando una baja durante los siguientes meses los casos por VIF en el Juzgado de Garantía.
Para el juez de Garantía Patricio Rondini, la violencia intrafamiliar tiene un concepto amplio, es todo maltrato que afecte la vida o la integridad física o psíquica de ciertos parientes o que tengan relaciones de convivencia o dependencia.
De acuerdo al magistrado, existe una amplio catálogo de delitos que pueden tener ese carácter, siendo los más recurrentes las lesiones, las amenazas y el desacato en contexto de violencia intrafamiliar.
"Estadísticamente, la mayoría de estos delitos son cometidos por hombres respecto de mujeres. El juez tiene amplias medidas cautelares, incluso sin formalización, para dar protección a la víctima, que si son quebrantadas pueden constituir un delito de desacato", adujo.
Dentro de las medidas cautelares -de acuerdo a Rondini- está la posibilidad de disponer el abandono del hogar común, prohibición de aproximarse o alguna terapia, entre otras.
"También, son frecuentes las salidas alternativas con alguna medida, que permite ya sea la separación en mejores términos o bien que favorezca retomar la vida en familia", explicó.
Respecto a la normativa, el abogado penalista Jorge Vásquez dijo que una norma que agrava el carácter de las lesiones causadas en el contexto de VIF, es el artículo 494 número cinco del Código Penal, que impide al tribunal calificar como leves las causadas en ese contexto, sino que la eleva a menos graves; no obstante ser, objetivamente, leves.
"Otro que endurece la sanción es el artículo 400 del código punitivo, que aumenta en un grado la sanción a aplicar a los responsables de VIF", aseguró Vázquez.
Ligera
Angélica Palma, directora regional (s) del Sernameg, señaló que hoy en día se están dando a conocer mucho más las situaciones de violencia en el contexto de relaciones con parejas e intrafamiliar; es decir, donde se ven involucrados otros miembros del grupo familiar.
Se ha avanzado en desnaturalizar esta situación, porque muchos casos no se denunciaban, pero el hecho que exista un aumento de la gente que está reconociendo estos sucesos, es un tremendo avance para la autoridad.
"Estos hechos ya no se toman tan a la ligera como se decía antes, cuando la gente comentada y señalaba "algo habrá hecho ella o él". Lo importante es reconocer que la violencia intrafamiliar es un delito; por lo tanto, requiere sanción. Las mujeres ahora se están atreviendo a denunciar las situaciones de violencia, y es por ello que se conocen más casos cada día", anotó.
La psicóloga y autoridad añadió que los casos de violencia cruzada son escasos, al comentar el hecho ocurrido en la Población Antonio Varas Norte.
Para Angélica Palma, esto correspondería a una respuesta de las mujeres cuando son violentadas. "Cuando se agrede constantemente llega la hora de decir cómo me defiendo, por eso se debe analizar la historia de violencia para saber cuál es la situación que se está enfrentando", manifestó.
El fiscal jefe de Puerto Montt, Marcello Sambuceti, afirmó que los hechos por VIF son una realidad y tienen que ser atendidos y atacados.
Para el persecutor, el delito no sólo tiene que ser formalizado y perseguido, sino que además se debe llegar a una pena.
"Como Fiscalía de Puerto Montt, más del 70 por ciento de las causas que ingresan tienen una salida judicial, lo que es por sobre la media nacional; es decir, es una línea de persecución regional que la Fiscalía de Puerto Montt ha asumido como propia", adujo el persecutor penal.