Puerto Montt, desde toda su vida, enclavado en pleno corazón de una zona que se caracteriza por sus rigores climáticos de copiosas lluvias, vigorosos vientos e intensos fríos, parece compartir el viejo adagio aquel de "en casa del herrero cuchillo de palo", al no estar adecuadamente bien equipado y protegido de esas endémicas inestabilidades atmosféricas.

Es así como, por años, el centro de la capital regional, cada vez que las precipitaciones arrecian, acaba por inundarse, dejando, en algunos casos, aislados sectores de su principal calle que es Antonio Varas; siendo habitualmente el más perjudicado el colindante con calle Ancud, sin olvidar los anegamientos de Angelmó. Reiterada anomalía que trae consigo padecimientos para los sufridos peatones e incluso para los propios automovilistas.

Igualmente, se presenta como una problemática habitual de la ciudad, la carencia de paraderos de la locomoción colectiva suficientemente seguros y resguardados del viento y los aguaceros. Cada cierto tiempo, suelen escucharse los clamores de la gente solicitando mejores refugios peatonales, porque los que hay están destartalados por la acción de manos vandálicas y no es mucho lo que abrigan.

Hace algunos días, este reclamo surgió de los usuarios de la locomoción urbana céntrica. Ellos piden la instalación de bien implementados paraderos en las áreas de la Costanera, Copiapó y Egaña, de preferencia, ya que cotidianamente -para desplazarse a sus lugares de trabajo y de estudios- , por estas carencias, se ven obligados a soportar -desprotegidos- la reciedumbre de las lluvias y la gelidez de las bajas temperaturas.

La inquietud -¡enhorabuena!- tuvo una muy buena acogida de las autoridades -Municipalidad y Transportes-, conscientes de ese imperativo, que decidieron ejecutar los estudios técnicos previos necesarios, para construir -ojalá pronto- refugios de hormigón armado y acrílico antivandálico.

Ya es tiempo que Puerto Montt se aclimate y acondicione como corresponde.

La vida siempre está en evolución y en procesos de cambios; nada dura para siempre y es innegable que cada mudanza nos trae nuevos aires e ideas, lo que nos permite crecer y mejorar a medida que pasa el tiempo. Nosotros, como gremio, como sector productivo, no estamos ajenos a este tipo de situaciones, tristes por una parte, ya que abandonamos o en una mejor conceptualización, dejamos libre una parte de nosotros que necesita también crecer. Alexis Fuentes, quien fuera nuestro gerente por 20 años, ha tomado la decisión de tomar otros caminos, donde tenemos la certeza que lo realizará con el mismo entusiasmo y pasión que nos entregó durante todo este tiempo, donde compartimos reuniones, risas, penas, frustraciones, pero sobre todo compañerismo y dedicación. Es aquí donde uno generalmente recurre a los lugares comunes con frases como "no es un adiós, etc.", pero creo que ese tipo de cosas no son necesarias para decirle a nuestro amigo que sólo se cumple una etapa y que pese a que no compartiremos el mismo camino, seguiremos trabajando por este sector productivo que, pese a los escollos, seguirá en pie ya que la necesitamos para vivir. Dentro de este ciclo, en donde nada ni nadie se escapa, hemos enlistado dentro de nuestras filas a alguien con ganas de seguir trabajando por el sector agropecuario de la provincia y de la región. Con ideas nuevas y enfocadas a empoderar la agricultura en nuestra zona y transformarla en un sector productivo potente, tanto en materia de sustentabilidad como en competencias de mercado y utilidades para quienes viven de esta actividad. Rodrigo Mardones es un experimentado dentro de la agricultura, con una vasta experiencia en el área, por lo que creemos traducirá en nuevas ideas y aportaciones para crecer. Con esto, no estamos desligando la responsabilidad de quienes están en los puestos de mando, como lo son los seremis, ministros, presidente, que son los que tienen la responsabilidad de facilitar y descongestionar las trabas que existen, a nivel de mercado, industria y retail, que impiden que este sector y su gente, surjan y tengan las condiciones necesarias para seguir desarrollándose y creciendo.

Eduardo Schwerter.

Presidente de Agrollanquihue. A.G.