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Argumentos del alcalde
Hace dos semanas, el Honorable Concejo que dirijo asumió la obligación de dar término a la concesión del Terminal de Buses. Esta decisión trajo reacciones de diversos actores, entre otros de quien dirigió la comuna antes que yo, en este caso el senador Rabindranath Quinteros.
Uno hubiera esperado ante el emplazamiento de los hechos, una reacción mas reflexiva y autocrítica al respecto. Pero no ocurrió así, todo lo contrario. En una carta dirigida a este prestigioso medio, prefirió tender una cortina de humo, para desviar la atención y no referirse a esta concesión, que al igual que las de la recolección de la basura o los estacionamientos subterráneos, estuvieron, desde el proceso de licitación, hasta sus contratos, marcadas por una evidente falta de rigor administrativo que pusiera a resguardo el patrimonio municipal y el interés superior de la ciudad.
Cada vez nos hemos ido formando la convicción de que estas concesiones privilegiaron factores de rentabilidad a los adjudicatarios, por sobre el bien superior de la ciudad, dejando al municipio escasos e intrincados márgenes para aplicar sanciones ejemplares ante incumplimientos de contrato. Esto no sólo causa graves perjuicios al municipio, al ver reducido su margen de acción para hacer cumplir la ley, sino que deja la imagen de la comuna y de su Concejo Municipal, expuestos a cuestionamientos de los que no somos responsables, ni vamos a seguir tolerando.
En la carta en cuestión, el senador me acusa de criticar proyectos en que tuvo participación como autoridad comunal. Esto no es efectivo; y que le quede claro a la opinión publica de la comuna y la región: cuando formé parte del Concejo Municipal que él dirigió, aprobé, cuando correspondía, las iniciativas que como bien señala permitieron avances efectivos de la comuna; pero en casos como las concesiones del Terminal de Buses, por ejemplo, yo no era concejal, y en el caso de la recolección de la basura, voté en contra de la propuesta presentada por la administración. Este es el tema de fondo, esto es lo que he criticado abiertamente. Sobre estas materias debiera hacer claridad el senador a la comuna, no sobre supuestas críticas a lo que el denomina "proyectos en que tuve participación". Eso no es efectivo.
La comuna debe saber que, producto de la superlativa falta de rigor administrativo que hubo bajo la administración del senador Quinteros, tenemos lo que tenemos en materia de recolección de basura, terminal de buses, estacionamientos subterráneos, o la pérdida de la concesión del borde costero como un sector estratégico para favorecer el desarrollo de la comuna.
Para terminar esta breve y necesaria ilustración de los hechos, estimo importante que la comunidad puertomontina y regional sepa que producto del contrato formalizado bajo la gestión como alcalde del actual senador Quinteros, tenemos la concesión del Terminal de Buses entregada por 47 años, generando un vínculo casi vitalicio, y estableciendo una serie de beneficios para el concesionario, que le han permitido eludir el pago de las multas durante varios años. Esto llevó, entre otras cosas, por ejemplo a que el Honorable Concejo Municipal, por la unanimidad de sus integrantes, resolviera contratar un estudio jurídico que permita zanjar definitivamente este tema.
GERVOY PAREDES ROJAS. Alcalde de Puerto Montt.
Tráfico vehicular
Como estudiante que cursa 4º medio en el Instituto Politécnico María Auxiliadora de Puerto Montt y hace uso diario del transporte público desde Los Pellines a Puerto Montt, quisiera mostrar mi indignación sobre el tráfico vehicular en la avenida del Hospital nuevo de Puerto Montt. Este lugar cuenta con varias vías de conexión desde distintos lugares de la capital hacia el centro hospitalario, donde se forma una cohesión de vehículos ya sea de uso público o personal. Mi molestia no es sólo el atochamiento de autos, sino la falta de señaléticas, control de tránsito, por parte de funcionarios de Carabineros y la falta de un semáforo que permita la buena circulación vehicular. Cada día, el bus en el que yo transito se demora un estimado de 10 minutos o a veces más en solo tratar de salir de esta avenida, provocando disgusto en los conductores. Hasta se han generado ataques verbales, porque hay autos que tienden a avanzar muy rápido y no respetan el paso ni de peatones ni del paso vehicular.
El horario donde se provoca mayor congestión es a las 7.40 de la mañana hasta por lo menos las 8.30 A.M. Es por esto que hago presente mi molestia, con la intención de que este reclamo sea leído por más personas que sé que han pasado por mi situación, esperando que pueda ser analizado por las autoridades a cargo de la comuna de Puerto Montt. Debo recalcar que necesitamos un semáforo urgente. No esperemos que ocurra un accidente, pérdida de vida o alguna colisión, por la ausencia de elementos de tránsito básicos que pueden ser otorgados por el municipio.
VALENTINA NEUMANN GÓMEZ.