En medio del período estival, son varias las administraciones municipales que están trabajando en sus nuevos planes reguladores, que ciertamente, darán forma y proyección a la zona, de aquí a los próximos 20 años al menos. Y las que ya tienen ese aspecto -por ahora- resuelto, están igualmente partiendo un nuevo período al frente de sus respectivos municipios, lo que siempre es una oportunidad para trabajar en el desarrollo futuro de sus respectivas comunas. Ya que aunque parezca una obviedad, conviene reiterar y resaltar la necesidad de un trabajo en equipo de al menos un par de municipios, para proyectar dicho progreso, como parte de una conurbación urbana que vaya más allá de las actuales fronteras de cada uno de ellos, como por ejemplo, el eje Puerto Montt - Puerto Varas, o los municipios de la cuenca del lago.
Porque a la luz de los antecedentes, hay ciertas cuestiones que hay que planificar en conjunto, como la conectividad de la capital regional con Puerto Varas, o la planificación inmobiliaria de las comunas de la cuenca del lago. Porque claramente la Ciudad de las Rosas ya no da abasto para la demanda existente y en ese contexto, Llanquihue aparece como la alternativa natural, lo que le dará una proyección muy interesante, ya no sólo en este aspecto, el habitacional; sino que también turístico, dejando de ser meramente industrial. En ese sentido, Llanquihue tiene una oportunidad histórica de planificar su futuro, estableciendo ahora las reglas del juego, para que su desarrollo no sólo sea armónico y sustentable, sino que además, responda al perfil arquitectónico que la comuna defina, en virtud a su historia e idiosincrasia de sus habitantes.
El siguiente paso debe ser concretar la anhelada conexión costera entre Puerto Varas y Llanquihue, con lo cual, no sólo se completará el circuito de la cuenca, sino que se le brindará un impulso turístico, inmobiliario y de inversión pública a esta parte del territorio, como nunca antes lo ha tenido, lo que a la postre genera otros múltiples beneficios a toda la cadena de servicios instalada y por llegar; que transformará a la cuenca en un gran destino del nuevo centro sur del país. Lo que planificado en conjunto por ejemplo con la capital regional, potencia a la zona de manera íntegra, por la virtuosa cadena de prestación de servicios que se pudiese generar, que a la postre, los beneficia a todos.
Es el momento en consecuencia de articular la planificación territorial como un conjunto, y así no crecer como parcelas aisladas, con todos los prejuicios que ello ya ha generado en el pasado.