Luis Toledo Mora
Si el año 2016 fue complejo para las autoridades que se relacionan con la pesca artesanal, por la crisis de la Marea Roja que puso un freno total a la actividad productiva en el sur del país, el inicio de este 2017 trasladó los problemas desde el mar a las oficinas de las reparticiones públicas y su máximos representantes.
El subsecretario de Pesca y Acuicultura, Raúl Súnico Galdames, presentó ayer su renuncia al cargo, coincidiendo con la publicación de un reportaje por parte del centro de investigación periodística Ciper Chile, titulado "Los correos que muestran los 'favores' del subsecretario de Pesca a grandes pesqueras".
En el texto se ventila la supuesta relación que habría mantenido entre 2010 y 2013 el ex diputado socialista con la Asociación de Industriales Pesqueros (Asipes), organismo al que su cónyuge habría emitido 34 boletas de honorarios.
"Se ha querido vincular de manera intencionada el trabajo que desarrolló mi esposa, en el ejercicio libre de su profesión, en un período además en donde yo no ocupaba ningún cargo público (2010-2012), con mi actuación como subsecretario de Pesca y Acuicultura, lo que considero inaceptable y sin ningún fundamento más que querer dañar mi imagen. Esto es parte de lo que entiendo forma parte de la vida personal y profesional de mi señora", sostuvo Súnico en una declaración pública difundida por la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura.
La salida del cargo de uno de los principales negociadores del Gobierno durante la crisis de la Marea Roja, coincide además con su citación a declarar en calidad de imputado por el vertimiento de salmones que se registró durante el bloom algal del año pasado, investigación que conduce la fiscal puertomontina Pamela Salgado, donde ya declaró el director de Sernapesca de Los Lagos, en la cual se esperaba durante la próxima semana recoger el testimonio del ahora ex subsecretario de Pesca y Acuicultura.
Reacciones
Zoila Bustamante, líder del Sindicato de buzos mariscadores de Caleta Estaquilla y presidenta de la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales de Chile, fue una de las dirigentes que negoció cara a cara con Súnico el año pasado.
Al conocer su salida, dijo a El Llanquihue que "no me voy a olvidar nunca de las promesas incumplidas que el Gobierno hizo con los pescadores artesanales durante la crisis de la Marea Roja, con un equipo negociador en el cual Raúl Súnico fue una pieza clave. Ellos fueron los responsables de que los mayores beneficios que se entregaron tras la grave crisis llegaran a dirigentes y gremios que no salen a la mar, y que fueron los que se sentaron a última hora en la mesa de negociación sin ser los directamente afectados".
Bustamante además criticó la escasa presencia en terreno del ex subsecretario, indicando que "siempre me llamó la atención que él (Súnico) no visitara nuestras caletas, y que siempre nos atendiera en una oficina. Éramos los dirigentes los que teníamos que llegar a Valparaíso, y no era su equipo el salía a terreno, aún cuando como funcionarios perciben viático. Eso fue distinto con otros subsecretarios como Jorge Chocair y Pablo Galilea, que recorrían la costa de Chile hablando con los pescadores".
En ese aspecto, también coincidió Luis Adué, presidente del gremio que agrupa a los pescadores artesanales de pueblos originarios, Prodelmar.
"Esperamos que la Presidenta, en el poco tiempo que le queda, no se vuelva a equivocar en nombrar a una autoridad que solamente trabaje para la pesca industrial. No estamos en contra de esa actividad económica, pero queremos un subsecretario de Pesca que también se preocupe del mundo artesanal y especialmente de la Región de Los Lagos que concentra el 40% de la pesca artesanal de Chile. También esperamos que nombre un subsecretario en terreno, y que los dirigentes no tengamos que perseguirlo para conseguir una audiencia", dijo el dirigente en diálogo con El Llanquihue.