El éxito de la producción y el elenco local de "Cascanueces"
FRUTILLAR. El ballet estuvo sábado y domingo en el Teatro del Lago, a sala llena en ambos días, donde el público ovacionó a los pequeños artistas.
Un espectáculo que buscaba impresionar tanto por su calidad en la danza como en la producción, un show que cumplió con dichas expectativas y las sobrepasó. Un ballet que supo innovar aún cuando es parte de los clásicos. Así se podría definir lo que se vio este fin de semana en el Teatro del Lago, luego de las dos funciones de "Cascanueces", una presentación que no solo llenó la sala dos días seguidos, sino que también cautivó a los espectadores desde todos los ángulos.
"La evaluación es cien por ciento positiva, en todo sentido. Creo que llegamos muy bien a puerto y además, los niños estaban muy contentos, porque para ellos todo el proceso fue una experiencia muy valiosa", comentó Carmen Gloria Larenas, directora artística y de Comunicaciones del teatro.
La también ex bailarina destaca la satisfacción con la que salieron los espectadores y los mismos integrantes del teatro. "Fue muy positivo el trabajo que hizo el coreógrafo, Esdras Hernández, con los niños, así que nosotros quedamos muy contentos, al igual que el público", afirma la crítica de danza y reconoce "siempre hay cosas que corregir", en miras del próximo año.
Experiencia inolvidable
Cerca de 140 alumnos de la Escuela de Ballet del Teatro del Lago -a cargo de Macarena Montecino-, fueron parte de esta primera versión inédita de la obra, hecha por el centro cultural frutillarino.
Natalia Konar, fue una de las que estuvo allí, compartiendo escenario con sus compañeros y los primeros bailarines del Ballet Nacional de Cuba.
La joven artista, cuenta cómo fue ser parte de esto. "La encontré una experiencia muy nutritiva para la escuela, con un proceso muy lindo, que fue trabajado por muchos profesionales y que disfruté mucho", relata Natalia, quien por primera vez pudo ser parte de "Cascanueces".
Similar fue lo que vivió Mara Osorio, que a pesar de haber estado en las versiones anteriores de la obra, presentadas por el teatro, esta fue muy especial para ella. "Fue demasiado precioso haber estado ahí. Me siento muy afortunada que el teatro nos de la oportunidad de hacer un 'Cascanueces' tan lindo, además de demostrar todo lo que he aprendido durante el año", dice la alumna.
La hermana de Mara, Elena, también estuvo el sábado y domingo en el Teatro, compartiendo los mismos sentimientos. "Para mí fue muy bonito participar, porque uno de mis papeles fue de "Caramelo Grande", que era con mucha energía y divertido", cuenta la menor de las Osorio.
Camila Soto es mamá de dos de las bailarinas de la escuela y detalla, qué le parece el que sus hijas hayan tenido esta posibilidad.
"Para nosotros como familia es un poquito cansador, pero cuando tu ves la cara de ellas y su entusiasmo, todo eso pasa a segundo plano", confiesa Soto.
"El proceso fue duro, pero logramos salir adelante e hicimos una función muy hermosa. Para mí esto es pura pasión", asegura Catalina Vega, una de las dos hijas de Camila que es parte de la escuela.
Rebeca Lópes, oriunda de Brasil y Olga Evensen, son parte de las adultas en la obra. Si bien ambas tenían relación con el ballet anteriormente, cuentan que integrar este equipo y haberse preparado para esto, fue diferente.
"Fue bastante intenso, pero fructífero. Los diseños, las pruebas de vestuario y todo eso, fue encantador, porque nunca había vivido todo eso", dice Rebeca.
Por su parte, Olga agrega que "fue una experiencia tremenda, fue algo que nunca en la vida pensamos que pasaría", cierra, quien está desde los inicios de esta escuela que este fin de semana cumplió un sueño de muchos.