La soledad sería más peligrosa que el alcoholismo y la obesidad
HIPÓTESIS. El cerebro es el único órgano "social" que poseemos, cuyo bienestar se ve afectado por la interacción con otras personas, según un experto en neurociencias.
Vivir en completa soledad sería más peligroso que el alcoholismo o la obesidad y podría, incluso, matar, asegura el neurocientífico argentino Facundo Manes, autor del libro "Usar el cerebro" (disponible en Chile), en el que propone conocer la mente para vivir mejor.
"Sentirse solo es un mecanismo biológico como tener hambre o sed, pero la diferencia está en que una persona puede comer o beber y se acaban sus problemas, pero no puede salir a la calle y gritar 'quiero tener amigos'" para llenar ese vacío, dijo Manes a la agencia EFE.
La ciencia ha avanzado en el conocimiento del cerebro en los últimos tiempos más que en toda la historia de la humanidad, pero, a juicio del profesional de la Universidad de Cambridge, todavía queda por aprender del "único órgano que trata de entenderse a sí mismo".
Aunque sabemos de los mecanismos de la memoria, de la toma de decisiones, de los pasos para el proceso creativo, de cómo funciona el lenguaje y cómo las emociones pueden influir en las conductas, nos falta responder a las "preguntas más difíciles", afirma el presidente del Grupo de investigación sobre la afasia, la demencia y los trastornos cognitivos , de la Federación Mundial de Neurología.
"No tenemos ni idea de cómo los circuitos neuronales dan lugar al pensamiento íntimo, personal y subjetivo en cada momento y tampoco tenemos una teoría general sobre el cerebro", señala Manes.
Uno de los descubrimientos más interesantes, a su juicio, es que se trata de un órgano que "no puede ser entendido en una conexión aislada sino en una conexión social".
Esa condición ha hecho que la especie humana esté en el lugar que está en comparación con otros animales y haya sobrevivido.
"Básicamente lo que ha hecho nuestra especie es sobrevivir, huir del peligro y buscar el placer", afirma el autor.
Enfermedades
La tecnología -advierte Manes- debe ser usada con "cautela", porque la ciencia aún desconoce qué efectos puede tener en un cerebro en desarrollo, es decir, hasta los 20 años.
Un uso exhaustivo de la tecnología agota nuestros recursos cognitivos, que son limitados, y puede generar estrés o adicción.
Al respecto, el neurocientífico dijo que hoy las enfermedades cerebrales son la primera causa de discapacidad en el mundo, por delante de las vasculares o de los accidentes.
En el caso de las degenerativas, Alzheimer incluido, su mayor incidencia está directamente relacionada con el aumento de la esperanza de vida.
Sin embargo, aún no existe cura para el Alzheimer, tipo de demencia más común.
Consejos para prevenir la demencia
Actualmente, en el mundo hay unos 47,5 millones de personas que padecen demencia, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). De ellos, cerca del 60% de los casos se debe al Alzheimer. Para prevenir, el neurocientífico Facundo Manes recomienda hacer ejercicio, llevar una activa vida social, tomar desafíos intelectuales, como aprender un idioma o a tocar un instrumento musical, además de procurar dormir bien.