Angelmó al rescate de las confianzas
Tras el debilitamiento de la Marea Roja y un estricto control de Salud, Angelmó ofrece productos marinos sin contaminar.
Angelmó, como nadie ni cosa alguna, necesita con urgencia revivir, recobrar el dinamismo de su actividad y rescatar su gran prestigio turístico y de identidad puertomontina, luego de sufrir descarnadamente los embates de la Marea Roja y su secuela de enorme daño socioeconómico en Puerto Montt y la zona.
Tras el debilitamiento de la plaga marina y un eficiente control sanitario local, se ha comprobado en las últimas semanas -a través de iniciativas promotoras como las "merluzadas" efectuadas en el típico mercado frente a Tenglo-, que no se justifica temor alguno, en el presente, en lo que respecta a la alimentación a base de productos del mar. Especialmente, porque todo lo que en Angelmó hoy en día se está vendiendo y consumiendo consta de la respectiva autorización de los servicios de Salud. Razón por la cual, los nuevos directivos recientemente electos del sindicato de la caleta, reiteran su llamado a la comunidad porteña y turistas visitantes, a reencantarse con el tradicional y emblemático rincón del puerto de las cuatro colinas.
El gremio está empeñado en recuperar las confianzas ciudadanas y en que Angelmó restablezca, como lo amerita, su prestigio turístico y gastronómico. Para ello, procurarán incrementar la difusión de las bondades del mercado, que ya se está normalizando y ha dejado atrás la triste experiencia de un fenómeno oceánico, que -felizmente- ya comienza a diluirse.
Así lo ha corroborado el equipo científico, que, -a bordo del buque "Cabo de Hornos"- estuvo estudiando y recogiendo muestras en la región, especialmente en el área de Chiloé, de las características y comportamiento del fenómeno de la Marea Roja. Y aunque todavía falta el análisis, observaron que el enfriamiento de las aguas y la existencia de nutrientes a océano abierto, está provocando una lenta retirada de la referida microalga venenosa.
Se trata, sin duda, de un prometedor argumento más, para confiar en el optimista llamado de los locatarios, que están ofreciendo un Angelmó renovado y con sus frutos del mar, adecuadamente, respaldados por el reconocimiento sanitario requerido.
Tras el temporal, la esperanza en la caleta.