Ante frustradas conversaciones, el paro de la Salud Municipal se torna indefinido
CESFAM. Trabajadores reunidos en la Plaza de Armas resolvieron continuar el movimiento que iniciaron ayer. Municipio y usuarios rechazaron paralización.
Lo que iba a ser un movimiento de advertencia, se transformó en una paralización indefinida de actividades en los cinco Centros de Salud Familiar (Cesfam) de Puerto Montt.
Los cerca de 700 funcionarios que se desempeñan en la salud primaria municipal, resolvieron ayer en la tarde, durante una asamblea realizada en la Plaza de Armas de la capital regional, extender la paralización de actividades, hasta encontrar respuestas a sus planteamientos, que apuntan básicamente al mejoramiento de sus condiciones laborales, que se traduzcan en un mejor trato a los usuarios del sistema.
La presidenta de la Afusam, Danae Maldonado, detalló que las bases reunidas en el lugar decidieron prolongar la movilización, ya que "no hemos tenido ningún acercamiento ni llamadas desde la Municipalidad". En su lugar, criticó, "se reúnen sólo con la Dirección de Salud Municipal y con algunos representantes de la comunidad, aunque no sabemos su representatividad".
La dirigenta, quien aseveró que adhirió el 100 % de los trabajadores a contrata y de planta, dijo que esperaban un acercamiento para que "la ropa se lave en casa. Pero esa no es la postura de la Municipalidad".
Anunció que se abocarán a elaborar un petitorio, el que esperan presentar este lunes.
Sandra Miranda, presidenta de la Atrasam, precisó que los SAPU funcionan. Los Cesfam están paralizados, con turnos éticos, entregando medicamentos y suplementos alimentarios. "No somos sus enemigos. Queremos una mejora para la comunidad, no sólo para los funcionarios", puntualizó.
Piden reponer recurso humano, que haya reemplazos ante licencias médicas, mejorar la infraestructura y contar con los insumos necesarios. "Los profesionales trabajan de dos o tres personas por box. Eso no es digno", ilustró.
Rechazan movimiento
El administrador municipal, Carlos Soto, rechazó el paro, ya que "no sólo es injustificado, sino que no hay demandas específicas a las cuales no hayamos correspondido". Añadió que "las puertas están abiertas para seguir conversando".
Sobre la convocatoria al paro, Soto afirmó que tuvo un apoyo de un 70 % y que "están activados todos los dispositivos para no dejar de atender a nuestros usuarios".
Ximena Cofré, presidenta de la Unión Comunal de Salud Primaria Urbana, expresó que ante la contingencia regional, "no estamos de acuerdo (con la movilización), ya que no es el momento para estar haciendo paros".
Leticia Coronado, presidenta de la Unión Comunal de Salud Rural, coincidió con Cofré. "Los usuarios no estamos de acuerdo con el paro de los funcionarios", subrayó.