Crisis social y ambiental
El impacto asociado a las transformaciones producidas por la industria acuícola en la Región de Los Lagos, en las últimas décadas, ha devenido en una crisis social y ambiental de insospechadas consecuencias para las comunidades y familias que tradicionalmente han estado productivamente vinculadas a la explotación de los recursos del mar. Ello también ha afectado a toda la comunidad regional. La movilización de estos últimos días ha colocado de manifiesto la profundidad de esta crisis y despertado la solidaridad de la gran mayoría de los ciudadanos de nuestra región.
Los dirigentes de la Democracia Cristiana, que suscribimos esta declaración, estamos conscientes de la tarea que en ella tienen las instituciones públicas llamadas a prevenir, fiscalizar y sancionar las responsabilidades de los actores empresariales, y de la que tienen para apoyar a las comunidades y las familias afectadas en sus fuentes de trabajo y subsistencia.
Primero, solidarizamos con los trabajadores afectados, compartimos el dolor de la pérdida de sus fuentes de trabajo, sentimos la angustia de lo que significa la inestabilidad para sus familias. Nos comprometemos a realizar las gestiones que estén a nuestro alcance para mitigar esta situación.
Segundo, hacemos un llamado al gobierno central a presentar un plan integral de largo plazo, que enfrente de manera decisiva la actual crisis social y ambiental. Consideramos que las medidas anunciadas son insuficientes para traer tranquilidad y paz a nuestra región y especialmente a las familias afectadas. Creemos que hay que establecer criterios éticos y desde ese piso, generar las iniciativas que promuevan un desarrollo sustentable de las actuales y futuras actividades productivas en las zonas afectadas.
Tercero, el gobierno central, además debe proveer mayores aportes iniciales y canalizarlos sino de manera directa a las familias afectadas, ya sea a través de los municipios. Estos son quienes conocen, están cerca y tienen los mecanismos para llegar a las comunidades y entregar los apoyos, coordinar las acciones mitigadoras e iniciar las iniciativas tendientes a propiciar nuevas actividades productivas y de servicios en la zona.
Cuarto, la Región de Los Lagos está productivamente asociada al mar, pero también este constituye un elemento central de su cultura e identidad. La crisis actual afecta a todas y todos quienes vivimos en esta región, lo mismo que las movilizaciones de nuestros compatriotas afectados.
Exigimos al gobierno central urgencia, sensatez y mayores recursos; nuestros ciudadanos requieren ser tratados con dignidad y vivir en paz y tranquilidad, para seguir aportando a su crecimiento y desarrollo.(Firman varios militantes DC de la Región de Los Lagos).
No se mira la realidad
Ante la creciente crisis que se ha generado en nuestra región, y que en los último meses y días ha afectado a las trabajadoras y trabajadores de la industria del salmón y de la grave situación que están viviendo los pescadores artesanales y sus familias. En mi calidad de ciudadano y ex alcalde de Maullín y ex presidente regional de la Democracia Cristiana de la Región de Los Lagos, vengo públicamente a declarar lo que sigue: 1.- Para quienes han desarrollado su vida entera dedicados al trabajo en el mar en nuestra región, conocen empíricamente que la Marea Roja no mata a los mariscos, situación de todos conocido, incluso hoy se han encontrado peces muertos. Hoy no hay una mirada a la realidad concreta que vive nuestra sociedad, algunos quieren seguir manejando situaciones mediáticas y tratar de bajarle el perfil a hechos que hablan por sí solos. Hoy la desconfianza llegó y se instaló en nuestra gente, producto de un sinnúmero de conductas erráticas y poco transparentes. 2.- Son muchos que, producto de sus conflictos de intereses, no se atreven a cumplir su rol fiscalizador, y una vez más la gente queda desconcertada y decepcionada del silencio cómplice de una serie de interrogantes y dudas sobre cuál es el fondo de nuestra crisis que vivimos como región. Quiero sumarme a todos los esfuerzos que hacen nuestros dirigentes, que exigen que exista transparencia en el proceso de cómo se desarrollaron antes, durante y después los depósitos de desechos que vertieron las empresas salmoneras en nuestro mar. ¿Existió seguimiento en este proceso? 3.- Una vez más, el Sr. Felipe Sandoval, presidente de SalmonChile, se equivoca en su entrevista en un canal de televisión. " Que por la distancia donde se botaron esos desechos no podrían volver a nuestras costas….", según sus estudios. Es muy importante que nuestros científicos, expertos y autoridades puedan también considerar la inmensa experiencia que tienen nuestros pescadores artesanales. ¿Por qué en el Canal de Chacao y en Carelmapu hoy hay desechos y malos olores? ¿Quién podrá realizar los análisis y estudios de la situación real sobre los efectos de nocivos que está generando estos desechos botados al mar por la salmonicultura? ¿Existirán organismos que no tengan conflictos de intereses y garanticen transparencia y objetividad en los resultados?
JUAN ERWIN CÁRCAMO CÁRCAMO.