Una de las contaminaciones que, invisiblemente, en alguna medida, va carcomiendo la interioridad del ser humano -especialmente desde su niñez y juventud- , tanto o más que la que daña en el entorno natural, es la que surge del uso descontrolado y sin ponderación de ese medio comunicacional en boga que son las nuevas tecnologías del internet y las redes sociales. Que más allá de sus ventajas de aporte instantáneo de conocimientos y de acercamiento global, también expone a sus usuarios -sobre todo a los menores de edad- a situaciones de discriminación, maltrato y acoso, siendo asimismo presa fácil del accionar de la delincuencia y la perversión, que también ha llegado a invadir con su perniciosa maldad los ámbitos ciberespaciales.
Frente a esta preocupante realidad, entidades como nuestro Diario El Llanquihue, la Seremi y Superintendencia de Educación Los Lagos, la PDI, la Fiscalía y la Universidad Santo Tomás, acaban de poner en marcha la campaña "BloqueaLaMalaOnda", mediante la cual se procura impulsar una buena convivencia escolar, buscando generar conciencia entre los jóvenes y menores, los padres y la comunidad en general, acerca de los riesgos que implica el empleo de internet sin estar impregnados de una conducta responsable, prudente y libre de excesos.
La cruzada alerta sobre esta complicada temática. Y uno de los primeros pasos, que son claves para avanzar en el resguardo frente a esta amenaza multimedial, del ciberbullying y similares, es que haya más acercamiento y diálogo entre los padres con sus hijos, planteando el tema con sencillez y cariño, dejando que sean los propios menores quienes aporten sus conocimientos acerca del asunto, y con ello sea posible establecer disposiciones de protección y un uso razonable, sano y de beneficio para el cibernauta juvenil y su proceso de formación humana. Así lo plantea, con serena claridad, el psicólogo Miguel Arias, que preside la fundación Ser Digital, que se especializa en técnicas alusivas al ciberespacio, y quien estuvo presente en el lanzamiento de la cruzada enfocada en la creación de conciencia sobre los riesgos que implica el uso inapropiado de las redes sociales por parte del estudiantado.