Frente a los últimos acontecimientos que han ocurrido en la región, vinculados al Florecimiento de Algas Nocivas (FAN), la Comisión de Pesca de la Cámara de Diputados anunció una sesión especial en Puerto Montt.

A la actividad, que se realizará desde las 9 horas de hoy en el Hotel Manquehue, asistirá el ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, así como el subsecretario de Pesca, Raúl Súnico.

El diputado Fidel Espinoza, quien asumió recientemente la presidencia de esa comisión, afirmó que ante el reciente bloom de microalgas, esperan recibir los testimonios de la industria, a través de SalmonChile, así como de los trabajadores y de la pesca artesanal.

Precisó que mediante esta reunión buscarán, junto al gobierno, "tener soluciones concretas que ayuden a paliar la situación extrema que hoy se vive en esta materia".

Espinoza resaltó el hecho que los demás miembros de esa comisión "hayan relevado la importancia de estos problemas y que hayan decidido que esta sesión se lleve a cabo en la capital regional", enfatizó.

También, analizarán el impacto en la pesca artesanal de Chiloé, por el cierre de áreas de extracción donde se detectó la presencia de Marea Roja.

La Comisión de Pesca, Acuicultura e Intereses Marítimos de la Cámara baja, también cursó invitaciones a Felipe Sandoval, presidente de SalmonChile; Juan García, presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales Demersales A.G.; Paola Sanhueza, presidenta del Sindicato Nacional Salmones Blumar; Luis Adue, presidente de Prodelmar A.G.; y Marcos Salas, presidente de los pescadores de Quellón.

Erwin Schnaidt Ávila

El pasado jueves 24 de marzo, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) dio por finalizado el proceso de retiro de la mortandad de peces desde los centros de cultivo afectados por la agresiva multiplicación de microalgas, que a partir de febrero causó cuantiosas pérdidas económicas y de biomasa en la industria del salmón.

Esa situación también puso en alerta la continuidad laboral de muchos operarios. Al haber menos cosecha, ya no será necesario disponer de los servicios de muchos de ellos.

Al hacer un balance de lo ocurrido y el efecto en el empleo, el intendente Leonardo de la Prida sostuvo que "si bien esta situación no es catastrófica, es grave y puede afectar a gran cantidad de familias".

Puntualizó que no es su ánimo minimizar lo ocurrido. "Se ha hablado de mil 200 despidos esta semana. Pensamos que puede ser un poco más", dijo, junto con reconocer que todavía no logran establecer una cifra en detalle, al haber distintos tipos de contrato.

Afirmó que al sumar los despidos del verano, con los proyectados por esta crisis, "se está empinando por los tres mil trabajadores despedidos. Es un número considerable, pero que no es catastrófico para la región".

Respecto de las pérdidas en la industria, De la Prida informó que la mortandad fue de 40 mil toneladas de biomasa, lo que representa un 15 % de la cosecha estimada para los años 2016 y 2017. Reiteró que "no es una situación que vaya a terminar con la industria, ni vaya a generar una crisis regional. No está a la altura de lo que fue el virus ISA", puntualizó.

Aventuró que la salmonicultura saldrá vigorizada, a la que "se le harán más exigencias medioambientales", dijo.

QUEJAS de TRABAJADORES

El presidente de la CUT Llanquihue, Jorge Pacheco, criticó que el gobierno aún no disponga de la información precisa en cuanto al número de desvinculaciones proyectadas.

A su juicio, unos cinco mil operarios serán exonerados, tanto de la industria, como de contratistas y de empresas prestadoras de servicios.

El dirigente estimó que hay cinco meses de plazo para establecer una propuesta de reconversión laboral, tiempo "que se extiende el seguro de cesantía", explicó. Pacheco insistió en conocer el dato de despidos, lo que calificó como relevante para aplicar políticas públicas de mitigación.

Acusó que esta crisis no ha tenido una adecuada conducción a nivel de gobierno y calificó como deficiente el actuar de las compañías salmoneras.

Similar impresión tiene Ricardo Casas, secretario general de la Federación de Trabajadores de Industrias Pesqueras (Fetrainpes), quien afirmó que la autoridad regional "no ha estado a la altura" de la situación.

Sobre el rol de la industria, afirmó que no parece relevante. "Toman sus cositas y se van. Tenemos claro que es inútil pedir algo para los trabajadores. Ellos se van a regir por la ley y no van a ir más allá", aseveró.

El dirigente de la Fetrainpes planteó que el gobierno debe exigir a las empresas que transparenten las cifras de despidos, ya que "incluso ellas pueden solicitar esos datos a sus contratistas y prestadores de servicios".

En al menos un 10 % decaerá este invierno la recepción de la producción de leche entre las principales industrias procesadoras de la zona, anunció Rodrigo Lavín, presidente de la Asociación Gremial de Empresarios Agrícolas de la Provincia de Llanquihue (Agrollanquihue).

Lo anterior se ve avalado en las cifras de enero, que ya representan una caída, conforme a los datos de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa). El volumen de recepción de leche en enero de 2015 fue de 94 millones 967 mil, pero en el primer mes de este año bajó a 92 millones 53 mil litros, un 3,1 % menos.

A pesar de esas cifras y la tendencia de la historia reciente, a Lavín le gustaría que esa proyección no se materializara, aunque al aterrizar en la realidad de los productores primarios "no veo por dónde se van a generar los litros necesarios para sostener los niveles productivos que teníamos hace dos años". Explicó que no toma en comparación los resultados de 2015, ya que lo consideró "especial, luego de afrontar una de las peores sequías estivales y la declinación de precios que fijó la industria". En enero de 2014, las plantas recibieron 95 millones 241 mil litros; es decir, un 3,4 % por sobre la entrega de este año. De acuerdo al mismo Informe de la Leche de Odepa, en todo 2014, la industria recepcionó 949 millones 984 mil 114 litros; mientras que en 2015 esa cantidad cayó a 892 millones 260 mil 245 litros, lo que representa una variación negativa de un 6,1 %.

El líder de Agrollanquihue dijo que algunos de sus asociados se están descapitalizando, a objeto de "hacer caja" para afrontar los desafíos de la temporada otoño-invierno.

Una de las medidas es la venta de vientres en ferias. Estimó que un 30 % de los animales transados en ellas, corresponden a vacas lecheras.

A ello sumó que las factorías lácteas siguen pagando bajos precios por litro, en una tendencia que arrastra desde el año pasado. "Se mantienen estables dentro de lo bajo", se lamentó, junto con precisar que el promedio es de $ 180.

Estimó que este invierno será "más severo" que el del año pasado, aunque reconoció que la primavera pasada fue "bondadosa" en términos de producción de pastos, lo que permitió guardar alimento.

"Sin embargo, esas reservas se están acabando" y la situación se podría agravar al no haber forraje para comprar. Por ello es que reconoce que "la recomendación es que hay que prepararse para lo peor", especialmente para afrontar un invierno más crudo, en términos de bajas temperaturas y precipitaciones.

Para mitigar este impacto, dijo Lavín, algunos productores están comenzando a aplicar el "modelo neozelandés". Esto significa que detienen las labores en sus planteles durante al menos dos meses críticos de invierno.