Familia encuentra muerto a agricultor que estaba desaparecido hace 15 días
CHAMIZA. Hija y yerno consiguieron dos kayak para buscarlo en el río. Creen que pudo ser asesinado.
"Desde un principio pensaron que era un accidente y se revisó todo el bosque, este campo y los colindantes, las orillas del río por los árboles, pero no se había revisado bien el río. Entonces se me ocurrió pedir dos kayak y bajar con mi marido. Empezamos a revisar minuciosamente, porque el río había subido mucho. Alrededor de la parcela 1 vimos un bulto (mi padre), que estaba enganchado entre quilas y ramas, lo que daba indicio de que fue arrojado o cayó y, por lo que yo vi, habría participación de terceros", dice muy afectada Ethel Schoreder, hija de Helmuth Schoreder Axt (66), quien se encontraba desaparecido hace 15 días.
Según la familia, fue visto por última vez el día 28 de mayo por los vecinos. Desapareció junto a un perro y su carretilla, lo cual generó extrañeza desde un comienzo. Por disposición del Ministerio Público, trabajó personal del Gope y la Brigada de Homicidios de la PDI de Puerto Montt, tanto en la búsqueda como en las diligencias; sin embargo, fue la propia familia la que dio con el paradero del agricultor que vivía solo en su parcela.
TRISTEZA
La hija de la víctima cuenta que el día de ayer encontraron su cuerpo, alrededor del mediodía, dando aviso de inmediato a la policía. Se encontraba a 250 metros de su casa.
"Pedimos justicia y que la investigación se demore lo necesario, que sea lo necesario en la autopsia, para que se determine la causa de la muerte, porque según lo que yo vi, no fue accidental. Además, desapareció con su perro y una carretilla y eso tampoco ha aparecido. Yo siempre supe que la carretilla no la podía subir al monte al hombro, porque era especial", cuenta Ethel.
Sobre su padre, dice que "a él le gustaba vivir solo, independiente de que lo veníamos a visitar constantemente. Hace hartos años vivía acá".
Helmuth era muy querido y se dedicaba principalmente a criar animales y la leña.
En la búsqueda participaron solamente tres de sus cuatro hijos.
Ethel sostiene que en el caso del Gope, "trabajaron súper bien, se mojaron la camiseta, recorrieron todo. Solamente faltó el río, porque por un tema de planificación se dejó para el final. La PDI, lo que es la parte investigativa, yo no estoy conforme, espero que hagan más y se dude de todo lo que se diga, porque muchas veces les dijimos que no se creía que era un accidente, se le daban los antecedentes, pero ellos decían que eran los que investigaban", reclama.
INVESTIGACIÓN
La fiscal Ingrid González fue consultada sobre el hallazgo.
"La última vez que se vio al agricultor fue el 28 de mayo de este año y desde ese día, se inició la búsqueda por Carabineros y la Policía de Investigaciones. Hoy (ayer) día llegaban los perros buscadores de personas y se está en eso cuando se encuentra el cuerpo en la ribera del río, camino a Automó, y la Brigada de Homicidios levantó el cuerpo y se remitió al Servicio Médico Legal de Temuco para la autopsia", detalló.
Se consultó si estaba ante la presencia de un homicidio, ante lo que la persecutora precisó que "mientras no esté el resultado de la autopsia que debe ser bastante acusiosa, considerando todo el tiempo de desaparición, porque también hay que determinar la data de muerte y la causa de muerte; a estas alturas no se descarta ninguna hipótesis".
El cuerpo fue trasladado a Temuco, ya que es necesario realizar otros tipos de exámenes adicionales que permitan ayudar en la investigación. Posterior a ello, será entregado a los familiares. Hasta el momento, no se tienen claras las circunstancias de muerte del agricultor de 66 años. La familia sólo espera que se esclarezcan los hechos y hallar a los responsables, si fue intencional.
El 28 de mayo, el contador es visto por última vez por sus vecinos. Andaba con su perro y una carretilla.
El Gope buscó por todo el bosque y los campos cercanos; sin embargo, el rastreo para revisar el río se dejó como última diligencia.
Ayer, la hija de la víctima y el yerno deciden salir a buscarlo en kayak, encontrando el cuerpo sin vida en el río Chamiza, entre las quilas y ramas.