Hacia sus altas terrazas y explanadas que se extienden hacia el norte, es la orientación que debe asumir la expansión de Puerto Montt -y que de hecho ya se está observando- para enfrentar adecuadamente su incontenible crecimiento demográfico, propio de su importancia estratégica y geopolítica como capital regional y puerta de acceso a la zona patagónica.
Primero, fue el área de Alerce el sector que socorrió a este puerto con espacios para la absorción del explosivo incremento poblacional, constituyéndose en una suerte de satélite urbano. Y ahora, por el mismo fenómeno habitacional, las miras están puestas en zonas limitantes de ruralidad como Cardonal y Alto Bonito, donde se encuentran próximos proyectos de importantes construcciones de viviendas, junto a algunas ya instaladas. Mientras que -a futuro- la conurbación de Puerto Montt con Puerto Varas parece ser una realidad inevitable.
Sin embargo, como se ha conocido, el nacimiento de estos núcleos de residencia está siendo afectado por defectuosas limitantes, siendo la más influyente la falta de una planificación integral, que haga hincapié, sobre todo, en la fundamental conectividad, que es tan indispensable para el buen funcionamiento del tránsito de la ciudad y el fluido desplazamiento de las comunidades de estos nuevos barrios insertos en el crecimiento puertomontino. Lo que significa la habilitación de las calles y áreas de estacionamientos necesarias, conectadas a las grandes rutas de tránsito interurbano, además de los equipamientos propios del bienestar ciudadano. Y así no vuelva a ocurrir lo acontecido con Alerce, cuyo grave problema conectivo, en vías de solución, aún sigue causando apremios, debido a que la planificación no siguió su curso natural, sino que vino después.
Es fundamental, por ende, la máxima coordinación entre los servicios que deben intervenir en estos procesos de expansión demográfica urbana, como Vivienda, Transporte, Obras Públicas y Municipales. Y así el desarrollo de la ciudad siga su curso normal, sin escollos ni retrasos, teniendo como principal objetivo aportar una existencia digna y confortable a sus nuevos habitantes.