La Unión Europea le pide "ambición" al Mercosur para lograr estancado acuerdo
negociación. Comisaria de Comercio del bloque reconoció dificultades para arribar a un consenso.
La comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, pidió ayer a los países del Mercosur que mantengan una "ambición equivalente" para concretar un futuro acuerdo de asociación con la UE, en la senda de continuar una negociación que sigue bloqueada.
"Hay dificultades", reconoció ayer Malmström en una conferencia de prensa sobre el impacto del comercio internacional en la economía comunitaria.
"Hay que asegurarse bien de que, evidentemente, incluso si hay voluntad por ambas partes, haya ambiciones más o menos equivalentes", destacó la comisaria sueca.
Consultada respecto de si espera que la UE y los países del Mercosur -con los que tiene abierta la negociación de un acuerdo de asociación desde 1999 (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay)- logren intercambiar sus primeras ofertas de acceso a mercados con motivo de la cumbre euro-latinoamericana que se celebrará en junio en Bruselas, Malmström dijo que "nos estamos escribiendo" sobre ello.
"Hay reuniones. Habrá una reunión en unas semanas para ver dónde estamos a nivel de ambición en las dos partes antes de que volvamos a negociar", aseguró citada por la agencia EFE.
En cualquier caso, destacó que "no puedo dar un plazo para eso".
La negociación entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur para alcanzar un acuerdo de asociación que contenga un tratado de libre comercio se inició en 1999, pero estuvo paralizada durante varios años por las posiciones inflexibles de ambos lados en defensa de sus propios intereses.
La negociación se relanzó en 2010 cuando tuvo lugar la cumbre entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe, con la perspectiva de que ambas partes presentaran pronto sus ofertas, plazos que se han ido posponiendo en varias oportunidades.
Según el Mercosur, ya tiene preparada su oferta de bienes, servicios, inversiones y compras gubernamentales, pero afirma que no ha podido intercambiarla porque los representantes europeos alegan que aún no finalizan el proceso de consultas internas para entregar su propuesta.
En agosto del año pasado, Brasil y Argentina, las dos principales economías del grupo, reafirmaron que el bloque sudamericano ya tenía lista su propuesta arancelaria, aún cuando Buenos Aires es más reticente a un acuerdo para proteger su industria.