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La historia reciente cuenta a que mediados de los años 80', un grupo cercano a los 200 porteños y sus familias llegaron hasta Calbuco, para unirse a la temporada de la merluza en la zona.
Fue así como en 1986, uno de los primeros oriundos de Valparaíso en arribar hasta la ciudad de las aguas azules fue Juan "Pinina" Castillo, con el objetivo de probar suerte lejos de su tierra natal.
Castillo, un hincha acérrimo de Santiago Wanderers, fue de aquellos que además de sueños y esperanzas de un futuro mejor, trajeron en el corazón la pasión de ser fanáticos del cuadro caturro.
"Llegamos con lo puesto y aquí formé mi familia, y sólo tengo agradecimiento por lo que esta zona me entregó", recalca.
Sobre el cuadro del puerto, este microempresario del área de materiales de pesca comenta que su amor por los colores de Wanderers es muy grande y que está muy expectante por el rendimiento del club en el campeonato nacional chileno. "Mi mamá es wanderina, mis hermanos son socios y acompaño cuando puedo al equipo jugando en Playa Ancha. No me pierdo ningún partido a través del cable y espero celebrar en el último partido que corone al campeón entre mi equipo y Colo Colo el sábado 6 en Valparaíso. Espero viajar ese día al puerto", explicó.
UN POPULAR CATURRO
El "Bam Bam" Alejandro Farías trabaja en el puerto pesquero, vive en la zona desde 1982, además de ser un popular personaje del sector portuario. "Soy un wanderino de corazón, trato de acompañarlos cuando juegan fuera de casa. En el 2001, tuve la suerte de estar en Playa Ancha, cuando lograron la tercera estrella", revela Farías.
Acerca de los partidos que restan frente a La Calera y Colo Colo, indicó que Wanderers es el hermanito menor frente al cuadro albo y la U. "Nos miran con temor y también como un equipo de provincia. Estamos haciendo sufrir a los demás. Somos un club esforzado, estamos en las buenas y en las malas y como hinchas estamos esperanzados en lograr el título 2014", enfatizó.
Otro de los wanderinos que vive en Calbuco es Raúl Barraza, también trabajador del puerto. "Soy porteño neto y llegué el 2011 por motivos laborales. Toda mi familia vive en Playa Ancha, en un sector cercano al cementerio. Es muy bonito lo que estamos presenciando, y sería un regalo para las miles de familias que lo perdieron todo en el incendio de los cerros ocurrido el 12 de abril pasado", subrayó.
Indicó que el cuadro de Valparaíso, para quienes viven en esta ciudad y en los cerros es un sentimiento y orgullo para cada uno de sus habitantes. "Nuestro hincha es más sufrido y no somos tan alharacos como los de la U y Colo Colo, para reaccionar y darnos de soberbio o para burlarse de los rivales. Vivimos el momento y si estamos en esta instancias apoyamos a la institución con todas las de la ley", agregó Barraza.
En cuanto al pronóstico para los dos partidos que restan del campeonato, comentó que espera lo mejor para Wanderers, aunque no quiso aventurar resultados. "Nos gusta soñar, aunque como hinchas somos más aterrizados. Tenemos claro que el partido definitivo será ante Colo Colo en la última fecha", vaticinó.
En tanto que Carlos Nahuelpán siente como un premio ver a su equipo peleando el título. "Sigo desde joven a Wanderers, no somos un equipo que no juega al exitismo, lo apoyamos siempre. El fanático caturro está siempre con su equipo y generalmente llenamos el estadio y eso nos diferencia del resto", remarca.
Nahuelpán explica que en Calbuco conviven unos 50 wanderinos con sus familias y que se reúnen para ver los partidos.
Por su parte, Gamadiel Contreras, quien maneja una vidriería en el sector San Rafael, rememora que "en 1973 llegamos a Villa Alemana y de joven íbamos a los clásicos ante Everton. Ahora estamos a muy poco de celebrar por tercera vez. Sólo queda que se cumpla y que el Indio se quede sin plumas", analiza.