Un sentido llamado a la unión de iglesias, hicieron pastores en la celebración del Día Nacional de Iglesia Evangélicas y Protestantes, junto con reiterar su rechazo a las leyes que atentan contra sus valores y principios.
La celebración más que un culto fue una verdadera fiesta de música y rogativas por parte de los alrededor de 5 mil personas, que coparon el centro de eventos Arena.
El intendente regional Nofal Abud, con el alcalde Gervoy Paredes, fueron motivados en algunas ocasiones a seguir oraciones tomados de la mano e instados por el senador Iván Moreira, que es evangélico, y quien al hablar a los asistentes dejó en claro que "con el alcalde tenemos diferencias políticas, pero estamos unidos por el trabajo de la iglesia". El intendente Abud se retiró en la mitad de la ceremonia.
Los evangélicos han dicho que hay en el país más de un 60% de fieles (entre ellos y los católicos) que no ha sido considerados por el gobierno, cuando se insiste en discutir leyes en favor del matrimonio de parejas del mismo sexo o del aborto.
Ante estos porcentajes, recordó la primera autoridad regional -al ser consultado por El Llanquihue - que hay cerca de un 67% de chilenos que votaron por la Presidenta Bachelet y que ésta tiene en el marco de su programa de gobierno la tolerancia e igualdad de todos los credos. "Esto es una condición esencial de este gobierno y sobre esa base acompañamos las distintas miradas y resolvemos en términos de generar condiciones para que cada uno de los chilenos puedan desarrollarse de su propia creencia".
Entre muchos himnos y alabanzas, se continuó con el culto, en el que se entregaron reconocimientos por su trabajo y entrega en el ministerio al Ejército de Salvación, que este año está cumpliendo 50 años de labor en Puerto Montt, distinción que recibió el pastor Francisco Paredes.
Otros distinguidos fueron los gedeones internacionales, por su cumplimiento del ministerio en la ciudad y el pastor Víctor Espinoza Cares, quien cumplió 50 años de entrega pastoral.
La predicación estuvo a cargo del presidente de la Mesa de Unidad Cristiana, Miguel Solís, quien agradeció al alcalde la gestión que permitió que celebraran su día sin los inconvenientes como el mal tiempo que el año pasado le generó al celebrar en la calle.
El predicador pidió por la unidad de la iglesia en Puerto Montt y no seguir en el silencio, a terminar con toda la división, discusión "que no honra a Jesús" y que era necesario hermanarse para pedir a Dios que derribe las murallas que se han levando en la iglesia.
En el acto, también la Mesa de Unión Cristiana entregó banderas evangélicas al senador Iván Moreira y al alcalde Gervoy Paredes, que agradecieron por el trabajo de estos pueblo y "el derroche de talentos", según dijo Paredes.
En tanto, el Concilio de Obispos de Chile festejó en la Plaza de Armas.