Ayudar a Bomberos hoy es más fácil. Al pagar la cuenta del agua, se podrá añadir una cooperación voluntaria al Cuerpo de Bomberos de Puerto Montt, conforme al nuevo sistema que para el efecto ya está empleando la institución bomberil. De esta manera, se reemplazará el actual sistema de donaciones a través de sobres. Por tanto, la presente campaña será la última de este tipo que se efectuará en la ciudad, para fortalecer el nuevo estilo de aportes ciudadanos a los caballeros del fuego a través de Essal, previo convenio con que cada hogar solidario sellará la innovadora modalidad.

Un promedio de 50 millones de pesos ha venido recaudando Bomberos en los últimos años en esta capital regional en las cruzadas del sobre. Fondos que se invierten en el financiamiento de material mayor y menor, así como en la adquisición de combustible e insumos indispensables para atender las emergencias. Respecto de lo cual cabe consignar que, en promedio, los voluntarios realizan cinco salidas diarias, entre atención de urgencias y servicios en general en el marco de su misión protectora de los bienes y vidas de la población.

Las colaboraciones vía Essal garantizan un funcionamiento más rápido y expedito, ya que mensualmente a la cuenta del agua se añadirá un mínimo de 300 pesos por cada hogar porteño, cuyos moradores, voluntariamente, deseen entregar su contribución al Cuerpo de Bomberos.

Los bomberos puertomontinos confían en que este nuevo canal para la cooperación a su accionar solidario, habrá de rendir positivos frutos. Y así, en lo posible, superar lo anualmente recaudado a través de las donaciones en sobres. Puerto Montt, siendo una capital regional gravitante en la zona patagónica del país, que avanza hacia los 300 mil habitantes, debería estar en condiciones de superar el promedio de 50 millones de pesos que al año entrega a Bomberos. Una noble entidad que, como todos sabemos, funciona gracias a la generosidad de sus hombres y mujeres voluntarios, entre otros aportes externos. Y que cada día del año da lo mejor que tiene -en valor y eficiencia- para proteger del fuego y otras tragedias a los hogares puertomontinos. Lo que la hace merecedora de la mayor ayuda posible, y por el propio bien.

Modernizar Chile es imperativo en diversos ámbitos, pero hacerlo sin reconocer y apreciar la realidad local no permitirá ver avances ni desarrollo. Desde la conectividad y el cabotaje que se generan desde las empresas asociadas a Armasur que unen Chile desde Puerto Montt al Cabo de Hornos, hemos estado atentos al proyecto del Ejecutivo referente a la Ley Corta de Puertos, el que en estos días ha pasado a segundo trámite constitucional. Si bien la ley en su conjunto es abordable y el gremio valora la decisión de modernizar el rubro y mejorar las condiciones laborales de los trabajadores, se considera fundamental evaluar los efectos económicos de colocar el gravamen en las zonas extremas, donde el principal medio de transporte se realiza por vía marítima, cuya importancia estratégica para el desarrollo de las comunidades se podría ver mermada. El impacto económico podría afectar fuertemente a las comunidades australes y la competitividad de la marina mercante costera, la industria salmonera y ganadera ovina, entre otros rubros. El proyecto de Ley Corta de Puertos busca recaudar sobre los cien millones de dólares para poder costear los fondos que tendrá que desembolsar el Estado frente al compromiso de la administración del Presidente Sebastián Piñera con los trabajadores portuarios que demandaban mejoras laborales y derecho a colación.

El gravamen que se propone es de treinta centavos de dólar por tonelada de carga transferida, y afectaría a las operaciones que se producen desde Puerto Montt al sur, no solo en 0,3 dólares, debido a la gran cantidad de recaladas y zarpes que se realizan en la zona. Un ejemplo claro es que 1 tonelada de Salmón exportada, pagaría ese monto también en la tonelada de: alimento, redes, balsas jaulas, retiro de basura etc., lo que va a perjudicar la competitividad de esta industria y el desarrollo de las Regiones Australes. En el caso de la conectividad austral, la carga en general se vería afectada, por ejemplo lo que se embarca en Puerto Montt hacia Natales o Puerto Chacabuco pagará 0,3 dólares por embarcar y 0,3 dólares por desembarcar, lo que se traducirá en mayores precios a los usuarios.

Confiamos en la fuerza de los Parlamentarios de las Regiones Australes, quienes se han comprometido con las familias de estas tres regiones australes, donde la vinculación de los poblados y ciudades puertos en materia de contacto humano y desarrollo del comercio, se genera impuesta por la geografía misma en el cabotaje regional.