El 600 570 8000espera su adhesión
Hoy 18 y mañana 19 de mayo, son los dos últimos días de la campaña de este año de allegamientos de nuevos socios para la humanitaria obra de socorro a los más pobres y desamparados que lleva adelante -ya por 70 años- el Hogar de Cristo a través del país y en Puerto Montt, desde 1982. Se trata, sin duda, de una maravillosa oportunidad para cuadrarse generosamente con los compatriotas más desvalidos, que en Chile llegan a casi 2 millones y medio de personas que sobreviven bajo la línea de pobreza, y de las cuales en la Región de Los Lagos la filial auxilia -con admirable amor y dedicación- a más de un millar de personas vulnerables de ambos sexos y de toda edad.
El fono 600 570 8000 espera el llamado de puertomontinos y sureños caritativos, comprometiéndose a 'hacerse parte como si fuera el primer día' en esta grandiosa obra de amor solidario, que junto con ayudar a paliar la miseria material que tanto sufren algunas personas, les aporta igualmente la fuerza moral para superarse y alcanzar la vida digna que merecen.
Integrándose como socios a esta noble y benemérita misión, la ciudadanía posibilitará alcanzar el objetivo que la Fundación Hogar de Cristo se trazó en esta oportunidad y que consiste en incorporar a 50 mil nuevos socios a través de nuestro territorio, que se hagan parte en la construcción de un país donde prevalezcan el respeto, la justicia y la solidaridad.
Desde el liderazgo de la obra del Padre Hurtado en las regiones de Los Ríos y Los lagos, se enfatiza su más profunda gratitud al valioso apoyo de los socios que les permiten financiar parte importante de esta gran tarea solidaria legada por el santo jesuita. Un compromiso inspirado, más allá de la caridad, por la búsqueda de justicia, respeto y equidad con los sectores sociales más desposeídos.
Insertos en una sociedad global mayoritariamente impregnada de superficialidad y materialismo, donde todo aparece relativo, estas opciones de cultivo de lo profundo y trascendente en el alma humana -como las fértiles sementeras de la solidaridad- emergen como una tabla salvadora, desde la cual asirse para conocer la verdadera felicidad que se logra ayudando a que otros también lo sean.