Mirta Vega

Un día de fiesta turística se vivió ayer en Puerto Varas con la llegada de los pasajeros de dos cruceros y varias delegaciones nacionales, que se congregaron desde tempranas horas en la ciudad lacustre y, principalmente, en los Saltos del Petrohué.

Los cruceros Crystal Symphony y Zaandam arribaron desde el puerto de Magallanes, a las 8 horas, y a las 8.30 horas ya comenzaron a desembarcar los primeros pasajeros a los tenders del buque para salir por el recinto portuario, donde 36 buses esperaban su traslado hacia diversos programas.

De los 36, más de la mitad salió hacia Puerto Varas, Petrohué y Cascadas.

En uno de los buses, El Llanquihue compartió con turistas de diversas nacionalidades. Muchos estadounidenses, canadienses, alemanes, suizos, españoles, austríacos y entre latinos, algunos brasileños. Todos muy ávidos de conocer.

Entre sus inquietudes, la guía Alejandra Freund tuvo que responder mucha información histórica y geográfica. Muchos encontraron que al llegar a Puerto Montt y recorrer parte de Puerto Varas, vieron un parecido con parte de Europa. Algunos lo asimilaban con Bélgica, otros con Austria y también con parte de Suiza.

Preguntaron cuándo fue la última erupción del volcán Osorno, sobre la vida silvestre, el clima. A otros les llamó la atención fuertemente que haya construcción dentro del parque nacional, explicándoseles que la infraestructura que vieron estaba en áreas privadas.

Contaron a "El Llanquihue" que les llamó la atención el paisaje, las diferencias de las aguas del lago Llanquihue y Todos los Santos. Lo peor que vieron fue en la avenida Angelmó. "La carga de cablería aérea a su salida del Puerto ¿por qué?", consultaron a la guía.

Lo que no se esperaban de Puerto Montt y Puerto Varas, era la "buena" infraestructura, tanto de caminos como de edificación. A las casas le encontraron un parecido a Europa y "mucha gente joven guapa", dijo un matrimonio que lo comentaban con otros viajeros.

Una madre con su hija del mismo nombre, Sonia Colón, de Puerto Rico, admiraron el verdor de la vegetación, pero no les gustó la aglomeración de buses. "Deberían programar para que no lleguen juntos", apuntó.

Pero lo que no supieron estas mujeres es que son sólo 4 horas y media de las que disponen para realizar varios circuitos, por lo que es imposible para guías y conductores programar en forma aislada.

Hubo también varios autos y vans, donde la guía Marcela Muñoz tuvo que responder las diferencias que encontraban los turistas que dejaron la Patagonia, sobre las estepas para entrar en el siempre verde de la Región de Los Lagos.

Pero muchos hicieron hincapié en lo interesante del viaje, porque desde Buenos Aires a Puerto Montt encontraron una diversidad de parajes. Se sorprendieron al llegar a la capital regional, que la economía "sea el salmón y no el turismo, con tanta belleza". Fue un comentario también recurrente por la escasa explotación turística del sur de Chile.

En el grupo hubo una familia china compuesta por 15 miembros de tres generaciones. Desde el abuelo a los nietos, pidieron canopy en Cascada Chile, que queda en los faldeos del volcán Osorno y que fuera el primero construido en el país y el segundo más largo de Sudamérica.

Entre otros turistas, la alemana Helga Buettger, de la ciudad alemana de Aachen, exclamó varias veces "es maravilloso" , comentando que ha estado tres veces en Petrohué y esta vez se vino sola, sin hijos ni marido.

Los complicados fueron los indonesios, que pidieron comida vegetariana, por lo que tuvieron que correr para ofrecerle algo más que ensaladas.

La gran mayoría que llegó temprano a Petrohué, eran del Cyrstal Symphony, perteneciente a una de las mejores líneas de crucero. Este trajo 1.070 turistas y 650 tripulantes.

Junto con estos, recaló en la bahía el Zaandam, de la línea Holland América Line, que trajo 1.400 turistas y 700 tripulantes.

Todo este peregrinar por los puntos turísticos de la zona demandó más de 60 vehículos, para trasladarlos a sus puntos de requerimientos: entre otros, al Fundo Olguita, uno de los programas apetecidos por la demostración de la vida de campo.

Las dos naves tienen similar dimensión: el Crystal es un poco más grande con sus 237, 10 metros de largo y el Zaandam, 237.

El Crystal ha estado en otras temporadas en el puerto, pero este es el único de este año de acuerdo a los anuncios de sus operadores navieros.

En cambio, para el Zaandam es su cuarto viaje de la temporada y le faltan otras seis recaladas. Este buque se hizo famoso por su temática. Tiene instrumentos musicales de famosos que decoran el buque, entre ellos el saxofón de Bill Clinton y guitarras autografiadas de Queen, Iggy Pop, Eric Clapton y los Rolling Stones.

Hoy, arriba a Puerto Montt el Silver Cloud, con 530 pasajeros.