Concesiones marítimas
Los peligros a la navegación marítima son uno de los grandes temas en el ámbito de la Organización Marítima Internacional, y cuya responsabilidad es de los estados. En aguas jurisdiccionales chilenas el representante para estos efectos es la Directemar por lo que sorprende como ha permitido ir saturando los canales, bahías y puertos naturales de concesiones, que son de uso y resguardo de los navegantes.
En la navegación para ingresar a Puerto Montt, ya se haga por el Paso Guar hacia la Punta San Pedro de Isla Maillen, o Punta Redonda de Isla Guar para recalar en la Capital de la Región de Los Lagos, los navegantes deben sortear más de 150 concesiones activas, 20 con aprobación técnica y 115 solicitudes, muchas de estas trabajando. Varias superan las 228 hectáreas al medio del canal de navegación o en sus límites, lo que pone en grave riesgo a la embarcación, ya sea por colisión con balsas-jaulas, artefactos navales de alimento para salmones o de hotelería para el personal encargado.
Tan grave es lo anterior, como los materiales que se sueltan de estos centros acuícolas, boyas, cabuyería (cabos y cuerdas de diversos diámetros), pasillos de acero a la deriva, incluso trenes de jaulas completas, etc., que, entre otras cosas, pueden "acorbatar" las hélices dejando sin control a la nave en cercanías de playas y rocas, quedando a merced de un apremiante salvataje.
A estos obstáculos deben agregarse los espineles de la pesca artesanal, en el Golfo de Ancud y Seno de Reloncavi. El peligro es mayor al querer entrar a la Bahía Chincui (camino a Chinquihue, con puertos y astilleros), porque en medio de ella se instalarán jaulas y cultivos, haciendo difícil las maniobras de naves pequeñas, e imposible poder atracar grandes buques, como se espera con los dos futuros puertos graneleros en esta zona, convirtiéndose en un atolladero que atormentará a la tripulación.
No lejos en el tiempo, ocurriría la negativa para arribar a Puerto Montt, ya que se compromete la profesión y las consecuencias que puede acarrear el accidente de un buque; por lo tanto, evitar estos resultados es responsabilidad de la autoridad competente.
JUAN FERNÁNDEZ LETELIER. Presidente CONMU.
Casinos municipales
Quedé muy sorprendido al ver que el alcalde de Puerto Varas pide a los demás casinos municipales que acepten la propuesta del Ejecutivo, y que la respuesta de la alcaldesa Reginato es sentarlo a la mesa.
Claro, porque el Ejecutivo propone que sigan los casinos en las comunas, pero que se licite al operador.De la sola lectura de los últimos acontecimientos en esta materia, queda de manifiesto que existe una confusión por lo que pelean los municipios. Al parecer no es si Viña tiene Casino o no. La verdadera discusión es si Viña sigue con Enjoy.
Que malo que una campaña mediática pueda frenar una legislación, haciendo que un sector tan importante quede marginado de la ley.
FRANCISCO OÑATE CASTELLANOS.
Patagonia ignorada
Casi sublime es reconocer mundialmente las maravillas de la Patagonia chilena que recorre todo el sur austral de nuestro país, desde el propio Seno del Reloncavi hasta el Cabo de Hornos. Un cordón montañoso enlazado con volcanes, fiordos, pasos y llanos cordilleranos, lagos, islas , canales, pampas, estepas , bosques, hielos y ventisqueros, conforman sin equívocos uno de los paraísos en la tierra.
Sin embargo, es imposible no admitir cuan distante está la mano del hombre en este entorno de maravillas, en su responsabilidad de construir ciudad que se reflejen cual espejos interpretando los dones que el Creador nos ha regalado para alegría del alma. Mientras estos santuarios naturales nos invitan al recogimiento de lo más hermoso del ser humano , por otro lado, seguimos siendo testigos de como se construyen adefesios en pueblos y ciudades destinados a poner puntos negros en la armonía del paisaje. Tal es hoy el caso de otro mamarracho que construye el municipio de Calbuco, a 30 metros de la iglesia: la casa de la cultura, un cajón sin identidad, que como estigma se suma a la plaza masónica donde se rinde culto al hormigón y al fierro.
FRANCISCO COFRÉ SILVA.
Entre botar y votar
Se siente…se siente… Sí, el mal olor de la basura en casi todo nuestro Chile. Ojalá que las urnas estén rebalsadas de votos para la elección, al igual como están los tachos de basura…
Ha costado tanto para que se declare emergencia sanitaria por la basura; pero la emergencia política hace rato que se declaró…¿Entre botar y votar?
LUIS ENRIQUE SOLER MILLA.